La manera en que se comporta el ser humano, me parece algo sumamente interesante. Cada experiencia vivida, te enseña que cada quien tiene algo guardado que lo hace ser como es. Si alguien es siempre enojado y encarado, es posible que en su vida haya sido enseñado a ser así o alguna circunstancia adversa lo obligó a ser así; pero si alguien es sonriente y amable con todos, no es necesariamente porque todo en su vida haya sido color rosa, sin embargo ha aprendido que los demás no tienen la culpa de lo que le sucede o le ha sucedido, y que simplemente hay que ser positivo aunque la situación no sea la mejor. La vida para nadie es fácil, eso es claro. Aún la realeza, con todas las riquezas que tiene en sus manos, no es verdaderamente feliz. La felicidad no se encuentra allí, en las cosas materiales, la felicidad está en tu interior, sólo tú puedes hacer de tu día el mejor de todos o simplemente dejarte llevar por aquello que quiso dañarte el rato. La llave de la felicidad está e...
No asumas, primero indaga antes de juzgar. Cometemos el error de asumir las cosas, sin antes haber verificado o sin ponernos en los zapatos de la otra persona. No sabemos qué ocurrió para que ésa persona actuara así o no te respondiera, no te llamara, no te buscara. No te apresures a suponer cosas que sólo están en tu mente, ya que eso te hará reaccionar de un modo inadecuado. Mejor, pregunta y aclara todo. »Importante: nunca, pero, nunca, expongas a ésa persona con otros, divulgando lo que sucede o sucedió con ella. Eso NO se hace. Las dudas que tengas sobre tal situación, las debes hablar directamente con quien corresponde, es decir, con la persona que se dio todo; no vas y lo hablas con terceros o andas dando indirectas a ésa persona, delante de otros, para hacerla quedar mal. No está bien... »»Aprende a practicar la prudencia, la discreción. Hoy es esa persona, mañana, podrías ser tú. Alicia Triviño -Todos los derechos reservados-.