¡Todo es perfecto!
Hoy pudiste levantarte de tu cama, te diste cuenta de que aún puedes respirar y de que ¡estás vivo-a-!.
Tienes un techo donde resguardarte del frío o de la lluvia, tienes algo con que alimentarte -muchos se levantan y se acuestan sin comer y no porque así lo quieran-...
¡Tienes trabajo! -muchos no saben cómo harán para pagar sus compromisos-.
No te falta nada, lo tienes todo. Sólo mira al cielo y agradece por lo que tienes.
Quizás el lugar en donde te encuentras en este momento, no es el lugar en donde quisieras estar, pero es necesario que estés allí hoy. Quizás deseas estar haciendo algo diferente, pero no tienes todas las herramientas necesarias para iniciar o... simplemente te hace falta la fuerza de voluntad; sí, esa que nos permite avanzar en la vida. Cuando logres amarrarte a ella, no habrá nada que pueda detenerte. Pero está bien, no desesperes... poco a poco la tendrás y empezarás a lograr todo lo que te propongas.
Por el momento, haz una pausa, respira y agradece. Lo demás, vendrá por añadidura.
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Alicia Triviño
-Todos los derechos reservados-
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